Se considera que Asa, rey de Judá, fue bueno en general. Pero el Segundo libro de Crónicas dice que, a pesar de hacer muchas cosas correctas, no destruyó los centros paganos de adoración.
En otras palabras, Asa fue un rey justo “en general,” lo que nos plantea la pregunta: ¿Está Dios satisfecho con que usted y yo seamos puros “en general,” o justos “en general”? Felizmente, Dios nos acepta sin condicionarlo a que seamos totalmente puros todo el tiempo. Pero la santidad da fruto, como una conciencia limpia, y que andemos más cerca de Aquel que es completamente Santo todo el tiempo.
Le habla David Jeremiah animándole a que tome el camino a una vida nueva. Descubra la definición divina de santidad . . . en su Minuto en la Biblia.