Una funeraria en Michigan ahora tiene una ventanilla para ver al difunto sin bajarse del coche. Simplemente uno conduce hasta una ventana grande y se detiene. Las cortinas se abren y allí está el difunto, ligeramente recostado para que sea más fácil verlo. Sale una gaveta en donde está el libro de invitados para firmar, y hay una ventanilla de depósitos seguros para depositar el donativo memorial.
Concuerdo con eso sólo en una cosa: el tema de la muerte merece nuestra atención. Excepto por los que estén vivos cuando Cristo vuelva, todos la atravesaremos. Y ahora es tiempo de hacer nuestros planes.
Le habla David Jeremiah animándole a que tome el camino a una vida nueva. Descubra la respuesta de Dios a la muerte . . . en su Minuto en la Biblia.