Mickey Cohen, famoso gánster estadounidense, profesó entregarse a Cristo. Pero meses más tarde, no había habido ningún cambio en su vida; seguía siendo gánster. Cuando se le confrontó, dijo que los atletas y hombres de negocios cristianos seguían en sus profesiones después de convertirse Cristo. ¿Por qué no podía haber un gánster cristiano? Cuando se le presentó el concepto bíblico del arrepentimiento, descartó todo interés en el cristianismo.

Jesús dijo palabras fuertes en cuanto a contar el costo de seguirle. Como el constructor o jefe militar decide de antemano cuáles serán los costos, también debe hacerlo todo el que quiere seguir a Cristo.

Le habla David Jeremiah animándole a que tome el camino a una vida nueva. Descubra cómo Dios bendice el arrepentimiento . . . en su Minuto en la Biblia.