Dicen que quien piensa que la práctica hace al maestro no tiene un hijo que está tomando lecciones de piano o violín. No es cierto que la práctica produzca perfección, pero sí es verdad que la práctica hace progresar hacia la perfección, aun cuando nunca la alcancemos.
La Biblia usa una palabra grande para describir el progreso en la vida cristiana. Es la palabra santificación. En breve, significa progresar y llegar a ser más como Jesús. La santificación en esta vida es un proceso continuo de progreso hacia la perfección. La perfección se alcanzará sólo cuando nos hallemos en presencia de Cristo mismo.
Le habla David Jeremiah animándole a que tome el camino a una vida nueva. Descubra la senda de Dios a la perfección . . . en su Minuto en la Biblia.