He oído que la manera más noble para que un hombre tenga razón es que admita cuando se equivoca. Eso es algo muy difícil para cualquiera de nosotros; a nadie le gusta decir: “Me equivoqué. ¿Podrías perdonarme?” Nuestro orgullo es nuestro mayor enemigo.
La palabra “confesar” en el Nuevo Testamento es interesante. Literalmente quiere decir: “decir lo mismo como.” Así que cuando le confesamos a Dios nuestro pecado, estamos concordando con él acerca del hecho de que hemos hecho mal. Eso no lo hace fácil; pero sí quiere decir que él ya sabe lo que hicimos y está listo a perdonarnos.
Le habla David Jeremiah animándole a que tome el camino a una vida nueva. Descubra el perdón de Dios. . . en Su Minuto de la Biblia.