Por un tiempo se creía que se entrenaba a los agentes a reconocer billetes falsificados haciéndolos estudiar los billetes reales, en lugar de los falsificados, a fin de que pudieran de inmediato notar la diferencia. Aunque eso es más rumor que verdad, dice mucho en cuanto al poder de la observación. Mientras más observamos lo real, más rápido notaremos lo que no llega a la medida.
El apóstol Pablo habla de lo que es verdadero, noble, justo, puro, amable y de buen nombre. La concentración en esas palabras, imágenes, personas e ideas dejará escaso espacio para lo que no es real y verdadero.
Le habla David Jeremiah animándole a que tome el camino a una vida nueva. Descubra lo mejor de lo mejor de Dios . . . en Su Minuto de la Biblia.